lunes, 15 de abril de 2013

No somos tan diferentes en primavera

He tenido la suerte de viajar por varios países de Europa y conocer distintos puntos de vista de la gente de a pié, y aunque todos tenemos estereotipos sobre nuestros vecinos, al final, te das cuenta que hay muchas cosas en común y que no somos tan diferentes. Ayer, como cada domingo, fuí a caminar a La Pulgosa (un parque a las afueras de la ciudad) y descubrí sorprendida que estaba lleno de gente, no éramos los mismos del invierno, sino que en esta ocasión, además de los deportistas, habían familias enteras con sus mascotas, tribus de jóvenes de distintas edades, parejas mayores que deambulaban por la zona; grupos de inmigrantes jugando al fútbol, es decir, una buena representación de la sociedad albaceteña. ¿A qué se debía esta invasión tan abrupta? pues nada más y nada menos que al tiempo, con más de 20 grados y un sol radiante los albaceteños se animaron en masa a salir a la calle. Definitivamente no somos tan diferentes en primavera que el resto de europeos que buscan el sol desesperadamente en ciudades como Londres, Berlín, Copenhague o Amsterdam por mencionar algunas.


El caso es que siempre en España nos hemos reído de los llamados "guiris" (extranjero, turista) que salen en manada a los parques de sus ciudades y de las nuestras cuando nos visitan y ven un poco de sol, pero es que aunque en la Península tenemos un tiempo mucho más privilegiado en primavera y verano, también tenemos inviernos duros y afortunadamente este último invierno, muy lluvioso; así que cuando hemos visto que el sol radiante llegaba a la ciudad también nos hemos literalmente "echado" a las calles, aunque aquí siempre de una manera muy especial. Había que ver cómo estaba este fin de semana la zona de bares, todos en la calle bebiendo, riendo y disfrutando del buen tiempo. Ah, eso sí, para ir a La Pulgosa, seguimos prefiriendo el coche (es más cómodo), aunque también he visto más bicicletas que en otros años.

Lo importante es salir a la calle, disfrutar del buen tiempo y olvidarnos de los problemas y es que Albacete estaba muy gris no sólo por la lluvia, sino porque ahora creo que no hay nadie que no tenga un familiar, amigo o conocido en el paro (sin trabajo), la cosa esta muy negra, muchos comercios y fábricas han cerrado. Corren malos tiempos en España en general y el Albacete en particular, pero por lo menos el clima nos acompaña para intentar animarnos y demostrar una vez más que nos somos tan diferentes al resto de Europa, aunque tenemos nuestras particularidades.

1 comentario:

  1. Yo creo que lo interesante es que en muchos aspectos podemos reaccionar casi instintivamente de la misma forma. Ser humano es una tarea poco sencilla y muchos se olvidan de serlo. La primavera es un buen tiempo para recordarlo.
    Un fuerte abrazo desde Toronto, desde un parque, desde un lindo día (bueno casi noche) de primavera.

    ResponderEliminar